Gran parte de la población, en mayor o menor grado, en algún momento de su vida tiene problemas relacionados con el aparato digestivo. El aparato digestivo está formado por el esófago, el estómago, los intestinos grueso y delgado, el hígado, el páncreas y la vesícula biliar. Relacionado con estos órganos, existen diversas patologías, a continuación repasaremos 5 enfermedades muy comunes del aparato digestivo. En este artículo hablaremos de la Enfermedad del Reflujo Gastroesofágico (ERGE), del Síndrome del Intestino Irritable, la intolerancia a la lactosa, de la enfermedad celíaca y de las Enfermedades Inflamatorias Intestinales (EII).
1. Enfermedad del Reflujo Gastroesofágico (ERGE)
La Enfermedad del Reflujo Gastroesofágico (ERGE) es un desorden digestivo que ocurre cuando los contenidos digestivos, comida o fluidos, vuelven del estómago hacia el esófago. A pesar de que las personas con asma son más propensas a sufrir del reflujo gastroesofágico, esta patología afecta a personas de todas las edades, tanto a niños como adultos.
El síntoma más habitual cuando se padece de reflujo es tener una sensación de quemazón en el pecho, es decir, lo que se conoce como acidez. Otros síntomas relacionados con la ERGE son la regurgitación, lo que coloquialmente se conoce como cuando una comide «se repite», exceso de salivación, dificultad o dolor al tragar o tener una mala respiración, entre otros.
Hay ciertos factores de riesgo que pueden influir en el desarrollo del reflujo: el consumo de alcohol y/o tabaco, la obesidad y la hernia de hiato. Además, las mujeres durante el embarazo pueden sufrir de reflujo gástrico. Por otra parte, ciertos medicamentos también pueden influir negativamente en la acidez gástrica.
2. Síndrome del Intestino Irritable o colon irritable
El Síndrome del Intestino Irritable (SII), también conocido como colon irritable, se trata de un trastorno funcional que genera dolor abdominal y cambios en el intestino. Esta patología afecta al intestino grueso y los principales síntomas que produce el SII son dolor abdominal, hinchazón abdominal y estreñimiento, diarrea o ambos.
El colon irritable se encuentra entre las 10 enfermedades más difíciles de diagnosticar, además que el diagnóstico se realiza mediante una serie de pruebas invasivas como la colonoscopia.
Por otra parte, en caso de tener síntomas como diarreas nocturnas, sangre en las deposiciones o en caso de perder peso continuadamente, habría que consultar un especialista porqué son síntomas de alarma.
3. Intolerancia a la lactosa
La intolerancia a la lactosa es un problema digestivo común, en el que la persona es incapaz de digerir por completo el azúcar, la lactosa, de los lácteos. En concreto, el sistema digestivo de una persona que no tienen intolerancia a la lactosa es capaz de dividir la lactosa en dos tipos de azúcares: glucosa y galactosa que son fácilmente absorbidas por el torrente sanguíneo. En los intolerantes a la lactosa esta permanece en el sistema digestivo causando los síntomas relacionados con la intolerancia.
Entre las personas intolerantes a la lactosa los síntomas pueden aparecer a las pocas horas de consumir alimentos que la contengan. Destacan las náuseas, la diarrea, la distensión abdominal i las flatulencias.
Se estima que cerca del 60% de la población adulta tiene algún grado de intolerancia, aunque la reacción al consumo de productos con lactosa es muy dispar entre la población. Así, hay personas que pueden beber un vaso de leche sin problemas, mientras que hay otras que con el consumo de muy poca cantidad ya se encuentran mal.
4. Enfermedad Celíaca
La enfermedad celíaca es de tipo inmunológico y se trata de una respuesta del cuerpo a la ingesta de determinados alimentos que contienen gluten, una proteína presente en el trigo, la cebada y el centeno. El hecho de consumir productos con gluten activa el sistema inmunológico del intestino delgado.
Los síntomas de la enfermedad celíaca se pueden confundir con los del colon irritable ya que también se puede presentar con diarrea, vómitos o hinchazón, entre los más destacados. La falta de absorción de los nutrientes que conlleva esta patología, puede afectar al desarrollo físico en niños.
No hay un tratamiento para curar esta enfermedad, pero los síntomas pueden sobrellevarse siguiendo una dieta sin gluten, siempre bajo la supervisión de un especialista. Entre las alternativas a los alimentos con gluten se encuentran la quinoa, las lentejas y las harinas de maíz y soja.
5. Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII)
La Enfermedad Inflamatoria Intestinal se caracterizan por desarrollar inflamación crónica en el tubo digestivo. Las enfermedades más conocidas dentro de la EII son la Enfermedad de Crohn y la Colitis Ulcerosa. Ambas se producen por una desregulación del sistema inmune, y son trastornos orgánicos de carácter crónico que alternan períodos de actividad y remisión.
La Colitis Ulcerosa tiene como característica la inflamación en la pared del intestino grueso. Los síntomas relacionados con la colitis son la diarrea con sangre y mucosidades, la fiebre y el dolor y la distención abdominal.
Por su parte, la Enfermedad de Crohn puede aparecer en cualquier parte del sistema digestivo, aunque afecta más frecuentemente el íleon distal y el colon. Lo síntomas son: dolor abdominal recurrente, diarrea, fiebre, fístulas y abscesos y masas abdominales palpables. Una sintomatología muy variada y que puede conllevar a la confusión con otras enfermedades.
Las causas de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal se desconocen, aunque se cree que puede deberse a la interacción de factores genéticos, ambientales y a cambios en la microbiota intestinal.